El fenómeno de la delincuencia en
el municipio de Planadas, que además de ser un problema social, es también un
problema familiar y personal, tiene a los pobladores al borde del desespero por
el alarmante aumentado de hechos delictivos en los últimos días, pasando a ser
un problema, que cada vez, es de mayor preocupación social, tanto por su
incremento como por su peligrosidad.
Precisamente fueron varios los
habitantes de este sector poblacional cuya identidad pidieron que se ocultara
por motivos de seguridad, que relataron a PLANADAS AL DIA que, durante el
último mes, varios ciudadanos fueron objeto de los ladrones que aprovechan las
horas nocturnas para cometer sus ilícitos, y sacar del interior de las
viviendas, electrodomésticos, herramientas, joyas, celulares de alta gama, y
dinero en efectivo. En este sentido, una joven fue interceptada por
delincuentes quienes la intimidaron con arma blanca a muy tempranas horas de la
noche, cuando se conducía por la calle octava, rumbo a su vivienda perdiendo su
teléfono celular.
De igual manera, un tendero muy valerosamente se enfrentó a los ladrones cuando estos intentaron hurtarle el producido de su negocio. También se conoció que a un comérciate le atracaron la vivienda llevándose varios electrodomésticos. Ya ni las aves de corral pueden dormir tranquilas, todo se llevan los delincuentes.
Hoy no es raro escuchar que robaron
a don fulano, o atracaron a don zutano. Amas de casa, comerciantes, campesinos
y propietarios de fincas están siendo azotados por las acciones delincuenciales,
un caso puntual y denunciado a PLANADAS ALDIA, ocurrió la semana pasada en la
vereda San Pablo donde los facinerosos llegaron a una finca y despojaron de sus
pertenencias, una mujer mayor de edad.
Vale resaltar que el municipio de
planadas por años fue una comunidad tranquila, compuesta por hombres y mujeres
dedicados al trabajo, organizados en asociaciones campesinas, amas de casa y
estudiantes, de pronto se ha ido transformado en un poblado peligroso, por la
creciente ola delincuencial y el consumo de narcóticos.
Algunos de los que hablaron
con este medio, indicaron que la ola delincuencial y la inseguridad los han
obligado a adoptar sus propias medidas de seguridad para no ser víctimas de los
facinerosos antisociales. Manteniendo una vigilancia personal permanente,
instalado cámaras de seguridad o mantener puertas con candado son parte de las
estrategias de protección que implementaran los comerciantes de esta población
sur tolimense.
La
delincuencia e inseguridad ciudadana se han convertido en uno de los temas
pendientes a resolver, la administración del gobierno del alcalde José funor
Dussan García.
Por estos hechos, los pobladores de esta parte del departamento
demandaron de las autoridades, locales, militares y policiales, acciones
contundentes para hacerle frente a este brote de delincuencia que los
vienen azotando con actuaciones de
sujetos a mano armada que están causando intranquilidad en toda la población.